Mayo, como viene siendo habitual durante los
últimos años, ha sido un mes muy concurrido. Más de 800 personas
visitaron el Poblado Cántabro de Cabezón de la Sal.
Muchos de ellos fueron niñas y niños
provenientes de diversos centros: Pepe Alba, La Salle, Santa Catalina o Manuel Lledías de Cartes se encuentran entre los colegios que disfrutaron de esta visita al pasado que representa el poblado. Las perfectas recreaciones a escala y peso de las armas que portaban en batalla los antiguos cántabros son el reclamo más solicitado entre los jóvenes.
La gran mayoría se divirtió con los talleres de barro y plastilina, donde pudieron reconstruir las cabañas de los antiguos cántabros, cada niño y niña aportando un toque personal, en algunos casos demostrando una gran imaginación.